Una cadena tonda es una variante especial de cadena en la que la disposición de los eslabones y su forma son importantes. Dado que existen muchos tipos diferentes de collares, merece la pena dividirlos en distintas categorías para poder asignar siempre con claridad la joya de cuello correspondiente. Los respectivos tipos de collares también están diseñados para fines específicos y tienen rasgos característicos. Un collar de tonda tiene numerosos eslabones muy unidos entre sí, de modo que no pueden distinguirse unos de otros a primera vista. La característica disposición vertical de los eslabones de una cadena tonda también garantiza que esta joya parezca estar hecha de una sola pieza. Las cadenas tonda sólo tienen una flexibilidad limitada, lo que tiene la ventaja de que no se anudan y ofrecen siempre la curva óptima para un collar. Así, un colgante atado a ella siempre permanece en el lugar donde debe estar. Una cadena tonda también puede llevarse sola, sin colgante. Los materiales más utilizados para este tipo de cadena son las aleaciones de oro de 8 y 14 quilates y la plata 925. Básicamente, los collares tonda son piezas de joyería sencillas que pueden llevarse con su diseño correspondiente tanto en la vida cotidiana como en ocasiones especiales.