Una pulsera encanto es una pieza de joyería en cuyo diseño final participa individualmente el propio propietario. El principio de esta joya es que la pulsera del encanto inicialmente vacía, una simple pulsera de eslabones de oro, plata o acero inoxidable, se equipa con nuevos colgantes, los llamados charms o abalorios, y así se va llenando cada vez más. Así se crea una joya muy personal que puede ser testimonio de experiencias especiales, viajes, logros o personas, pero también puede tratar otros temas. También puede llevar símbolos de la suerte o de la fe. Una pulsera de abalorios siempre es variable y si un abalorio ya no está de moda o ya no gusta, puede sustituirse por otro. La pulsera del encanto con sus dijes individuales ha destacado especialmente como regalo, porque ofrece un amplio abanico de posibilidades. Además, están disponibles en todas las gamas de precios, de modo que en ellas pueden colgarse incluso pequeños colgantes de gran valor material y, en última instancia, se crea una pieza de joyería global especialmente valiosa. El nombre de la pulsera del encanto proviene del hecho de que su propietaria está siempre a la caza de nuevos dijes y prácticamente "pide" que se los regalen otras personas.